sábado, 18 de julio de 2009

Las críticas del espectador estándar: Harry Potter y el Misterio del Príncipe

... o Harry Potter y el Príncipe Mestizo, al gusto. El caso es que así de primeras, y para empezar ordenadamente esta humilde opinión escrita, lo más reseñable que se me ocurre comentar acerca de la última del mago con gafas es PORQUÉ TAAAAAAAAN ROMÁNTICA/HORMONADA!? REALMENTE ERA NECESARIO!!?? En serio, soy consciente de que es algo muy presente en los libros la evolución de los personajes a lo largo de los años, su transición a la madurez y las relaciones que entre ellos se establecen, lo cual incluye las sentimentales. Y no soy contrario a ello, de hecho soy de la opinión de que el tratamiento que se le da en los libros es en ocasiones sorprendente, aportando bastante frescura, si es que se le puede llamar así. Pero acaso por ello HABÍA QUE BASAR LA MITAD DE LA PELÍCULA EN LOS ESCARCEOS DE UNOS Y DE OTROS!!!??? Yo creo que no.


Por alguna razón ésta sexta parte es de la que menos he retenido en la memoria, siendo también la que menos me gustó, o quizá, mejor dicho, la que menos me "llegó" . A lo primero contribuye, que duda cabe, que no me la leí del tirón como las cuatro primeras partes, y que no me impactó tanto como "La Orden del Fénix". A lo segundo, el que una nubosa tarde londinense de invierno, no se me ocurriese otra cosa que acompañar la hamburguesa de la hora de la comida con un vistazo al típico periódico gratuito, y que a los cabronazos/as del "LITE Standard" no se les ocurriese otra cosa que desvelar el puto clímax dramático de la historia, algo que venía sospechando desde hacía tiempo, pero coño, no es lo mismo una sospecha que una confirmación. Ante la improbable posibildad que que algún inocente lector con ganas de comenzar la saga acabe leyendo esto, me lo guardaré pa´mi. El resto ya sabéis de qué hablo.


Escena memorable: Hermione, disgustada, sale del salón de Gryffindor y se sienta en un escalón, junto a una gran ventana. Harry va a consolarla y bla, bla, bla... La ventana, qué ventana. Es una noche lluviosa, y vemos los montes que rodean el castillo. Una luz pálida entra por ella, dejando una atmósfera muy especial en la habitación. A la altura de los libros.

Y volviendo a la película, y puesta su mayor desgracia sobre la mesa, reconozco que, a pesar de sus defectos, es poseedora de muchas virtudes. Comenzaré por el director. Despues de ver lo que hizo con "La Orden del Fénix" quedé más que satisfecho con el resultado. David Yates adapta de nuevo la historia con un enfoque muy realista (no llega al nivel de M. Night Shyamalan con "El Protegido" y "La Joven del Agua", pero una pizca de ello hay). Por eso es comprensible que a mucha gente le disguste. Porque estamos hablando de una historia sobre la Magia, señores. Y es muy lógico que se prefiera una visión más centrada en La Madriguera, Hogwarts, el Ministerio de Magia... un poco más luminosa, quizá... el caso es que el señor Yates ha aportado la suya al proyecto: cámara nerviosa, planos rebuscadillos, tonos fríos (a veces "congelados"). Sabe perfectamente lo que busca (como antecedente, estoy viendo su miniserie "State of Play", y parece que el tipo tiene un estilo bastante marcado) y por ello funciona. Pero solo lo hará para aquéllos que compartan esa forma de ver los libros de la Rowling. De momento ya le han dado el mando de las dos últimas películas, basadas en "Harry Potter y las Reliquias de la Muerte", así que, tirón de la historia aparte, parece que su forma de contarla no desagrada al espectador.


Otra escena memorable ¿¿SPOILER?? Nop: Al principio, entre los magníficos planos aéreos de Londres, destaco aquél en que la cámara desciende a ras de suelo a la altura de Trafalgar Square, siguiendo por Tottenham Court Road, to tieso, entra por El Caldero Chorreante hasta el callejón Diagón y... en fin, los pelos como escarpias.

Lo que nadie puede, o debería negar, es que todas y cada una de las películas de HP han sido, son y serán producciones más que dotadas en medios y con mimo hacia el detalle, en todos los casos técnicamente impecables. La última entrega no es menos, y hace gala de un diseño de producción y efectos visuales de primera línea. De hecho, tuve la impresión de que se regocijan en mostrar el aumento de sus capacidades en el apartado visual, con escenas especialmente grandiosas (mención especial la parte de la cueva y el lago). Y, sin embargo, no podemos decir que sea éste su principal aliciente. Salvo cuatro o cinco excepciones en las que la lucha se desata en forma de fuego y algun rayo, el resto del filme es bastante contenido.

Esta entrega prima dos vertientes: romance (muuucho romance) y misterio. La lista de personajes involucrados en vaivenes amorosos es "extensa": Harry Potter, Hermione Granger, Ron Weasley, Ginny Weasley, Dean Thomas, Lavender Brown, Pepita la Pollera... todos juntos y revueltos. Tiene razón la gente que dice que han dejado de ser películas de niños. Lo han hecho para serlo de adolescentes. Como prueba las risitas tontas de tres chicas sentadas justo delante de mi en el cine cada vez que uno de los protas se ruborizaba ante la visión del "ser amado". Y de vez en cuando Harry se escapa de tanta tensión sexual para mantener la búsqueda de información que él y Dumbledore se traen entre manos, y que podría conducirles hasta la forma de vencer a Voldemort. En esta actividad Ron y Hermione realizan una grandiiiiiiísima aportación en forma de palmaditas en la espalda y solemnes "eh, no pensaras que puedes hacerlo solo". Después de eso vuelven a importante labor de frotarse contra las puertas y columnas de Hogwarts, a fin de aliviar la consabida tensión. A pesar de todo, esta segunda parcela de la historia conserva una importancia suficiente como para que el género aplicable se mantenga en "fantasía", y no pase a "culebrón".

Última escena memorable: A la izquierda, una escalera en penumbra. A la derecha, un largo pasillo que desemboca en una puerta. En la escalera, más alumnos calenturientos metiéndose mano. En el pasillo, y alejándose con esos andares tan extraños que ha cogido, Draco Malfoy a punto de liarla. Contrastes...

En cuanto a las actuaciones, nada cambia demasiado. Alan Rickman simplemente parece haber nacido para interpretar a Snape. Daniel Radcliffe me convence como actor y como Harry Potter lo mismo que el primer día, mu poco (sin embargo me resultó curiosa su particular versión de "Harry Petas"). Emma Watson y Rupert Grint son actores bastante más naturales, si bien falta verles en otros papeles. Tom Felton por fin hace evolucionar a Draco Malfoy, y, como podréis deducir por lo ya dicho, me ha gustado su aire "voy a mi puta bola". Jim Broadbent me gustó mucho como Horace Slughorn. A Helena Bonham-Carter francamente le pega el papel de psicópata desatada y excéntrica. Dos personajes con relativa importancia y con los que me eché unas risas son Jessie Cave, en su papel de fan de los Backstreet Boys (Lavender) y Freddie Stroma (como el chulopollas integral Cormac McLaggen. Una interpretación con reminiscencias al prota de "No es otra estúpida película americana"). Michael Gambon se convierte en Gandalf. Por último, mi voto particular va para Evanna Lynch como Luna Lovegood, no tanto por sus dotes sino porque es uno de los personajes más posoitivamente gilipollas que he visto últimamente.
¿Sabías que... El niño ese que hace de Tom Riddle niño y que dan tan mal rollo, es sobrino de Ralph Fiennes?

En resumidas cuentas, no puede decirse que esta sea la mejor entrega. Mucho pasteleo, y a pesar de durar dos horazas y media, a veces queda la sensación de que han metido demasiada "tijera". Sin embargo, su estilo y calidad son innegables. Es larga, pero no cuesta verla. Acompañan bastantes momentos verdaderamente "mágicos" y, que leches, muy mal cineasta hay que ser para no sacar algo bueno del material del que tratamos. Como alguien comentó unas filas más allá tras finalizar, "no pasa nada en toda la película". Hombre, tanto como nada, no. Pero, a fin de cuentas, no es más que una introducción a las dos últimas y definitivas películas, en las que va a haber andanadas de Hostias (la última peli promete ser frenética). Y como tal cumple con creces.

4 comentarios:

Elena S. dijo...

Joooo buuuf que perezaaa si me tengo que volver a poner con el maldito cuarto (lo deje en el cuarto o el tercero?¿..?) libro para poder reengancharme a las pelis...tengo el hilo perdido por completo ya....ya sabes, me quitaron las ganas de seguir leyendo los muy despiadados redactores del QUE o el ADN al desvelarme "un detallito" de importancia...

en fin, Ainja tb vio la peli el finde y por lo que veo se quedo como tu, que muy pastelazo y pelin larguita...

Melon P. dijo...

Poss me uno a lo de excesivamente romantica. Pa mi gusto, sobraba tanto amorio, y faltaba historia de la que interesa.
Tambien estoy de acuerdo con lo de que esta mas enfocada a publico adolescente,...
Por lo demas, como siempre me pasa con las pelis de Harry Potter, el libro supera con creces a la pelicula, xo bueno esta bien.
Lo que mas me ha gustado: las escenas con el Voldemort niño...acojonaba el chaval...

Por cierto, a mi tambien se me pusieron los pelos de punta con el plano aereo que recorre tottenham court road....sensacion extraña la de saberse al dedillo, cual iba a ser el recorrido que seguiria la camara, por la simple razon, de haber paseado por esa calle un monton de veces...

ornitorrinko dijo...

jejeje, cómo sabía que te gustaría... imagínate, era mi parada del curro!!! Casi tengo cuatro orgasmos seguidos en en cine, pero ná, al final se quedaron solo en tres... En el fondo, siempre queda un poco morriña.

En cuanto a elena... Maaaaaaaala, maaaaaaaaaala, maaaaaaaaaaala!! Ya te estás poniendo a recupuerar!

Ainhara dijo...

Pues si, me parecio pastelazo pastelazo...y lo de larga pues depende como se mire: no me pareció larga pero si que creo que el tiempo se podia haber utilizado mejor, porque que se tiren dos horas con los lios amorosos y 20 minutos para el final me parece traca.
A parte de eso se inventan cosas, se olvidan de personajes y un conjuro Petrificus totalis en una escena muy importante.
En cuanto a lo mas puramente cinematografico solo dire que el director se hubiese podido lucir de lo lindo si la pelicula hubiese terminado como el libro.
Me ha encantado el papel de Luna lovegood...esperando a la 1ªparte de la ultima peli